miércoles, 26 de noviembre de 2014

Cocinando un cometa

Un poco de polvo y roca, una pizca de materia orgánica, algo de gases congelados, y mucho hielo. Preparar a fuego muy, muy lento, y dejar reposar unos cuantos miles de millones de años. Cocinar un cometa requiere mucha paciencia y grandes cantidades de material prístino desde el origen del sistema solar, al no ser que uno esté dispuesto a cambiar la receta original por algo mucho más casero, pero didáctico y divertido.

Desde principios de octubre el equipo de Ciencialia está impartiendo actividades extraescolares en el colegio público Sancho Panza de Granada. Son actividades de profundización en ciencia, en las que exploramos todos los campos de las ciencias naturales mediante la experimentación, la observación y las manualidades. Sin duda está siendo una experiencia enriquecedora y con la que aprendemos cada día, tanto los alumnos como nosotros.

En nuestra última clase nos pusimos manos a la obra para fabricar pequeños cometas con hielo seco y algo de "aderezo". La actividad resultó un exitazo, por lo que aprendimos y disfrutamos profesores y alumnos, pero especialmente por el lujo de poder contar con todo un experto en el sistema solar, nuestro amigo y compañero Pablo Santos, astrofísico del Instituto de Astrofísica de Andalucía. Hay que agradecerle a Pablo su entrega y su pasión explicando la ciencia y su participación generosa en esta actividad.

Aquí os dejamos algunas imágenes para que veáis el resultado de este entretenido experimento.

Pablo enseña un modelo del cometa Churyumov-Gerasimenko

La mejor manera de aprender es pringándose las manos

¡Un resultado estupendo!

Encuentra las 7 diferencias

Aprovechamos para recordar a los profesores y a los padres de alumnos que podemos visitar vuestro centro con este y otros talleres educativos. Echad un vistazo a nuestra página web y no dudéis en contactar con nosotros.